Escritorio

Cambiando a Wayland

Soy un usuario/apasionado de KDE Plasma que, pese a la bondades que leído sobre Wayland, aún continuo (continuaba) apegado al vetusto y confiable Xorg. Esta es mi historia de cómo, por fin, he conseguido superar el último escollo y dar el salto.

Han sido varias veces las que he tratado de dar el salto al Wayland y, aunque todo parecía correcto y pulido, había un asunto que siempre me tirara para atrás. Por alguna extraña razón, el escritorio solo me permite añadir plasmoides en la parte superior y, los diálogos propios de plasma sólo ocupaban como un cuarto de pantalla. Algo tal que así:

Como se puede apreciar en la primera captura, utilizo Latte Dock para anclar mis aplicaciones más usadas y siempre he pensado que habría algún tipo de incompatibilidad con Wayland, lo que me llevaba a volver, una vez más, a Xorg.

Hoy se me ha encendido la bombilla y he pensado que el problema, tal vez, no estuviera en Wayland sino en el propio Latte Dock, por lo que he revisado las opciones de esa aplicación y he encontrado ésta.

Tras desactivarla, parece que el problema, y con él mi último impedimento para usar Wayland, ha desaparecido. Con algo de tristeza, digo adiós a servidor gráfico, que me ha acompañado en los últimos 20 años. Snifff.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *